El cine nace con voluntad sonora. En las primeras filmaciones cortas en las que aparecen actores y actrices bailando, el espectador no oye la música, pero puede observar sus movimientos. Todos los instrumentos eran válidos para hacer música en el cinematógrafo aunque el piano (y la pianola) era normalmente el más apetecido. El arte de la música en el cine, de la época dorada de Hollywood de los años 1930 y 1940, se exploran en el documental, Music for the Movies: The Hollywood Sound (1995), una revisión nostálgica de las bandas sonoras detrás de clásicos como La novia de Frankenstein (1935), Casablanca (1942), o El jorobado de Notre Dame (1939).
El documental está dirigido por Joshua Waletzky y narrado por John Mauceri, director de la Orquesta Nacional de la BBC de Gales. Una cápsula del tiempo fascinante de la música y la historia del cine de Hollywood, que explora la compleja relación entra la imagen y la música en el pantalla grande.
Aquí puedes ver el documental:
VSM (@SofiaSanmarin)
Fuente: Cinephilia and Beyond