Video. The Exorcist y su impacto cultural en 1973
Quizá el primer filme de terror en el que pensaría la mayor parte de la gente si se les preguntara (con excepción de los fanáticos del género, claro está), sería El Exorcista, dirigido por William Friedkin con un guion de William Peter Blatty, basado en su propia novela homónima, y estrenado en 1973, que de inmediato causó alboroto y hasta pánico en el público.
La película protagonizada por Ellen Burstyn, Jason Miller, Linda Blair y el actor sueco habitual en el cine del gran Ingmar Bergman, Max von Sydow, se convirtió en un fenómeno no solo de taquilla (recaudó 232 millones de dólares solo en Estados Unidos, cifra que supera -en cuanto a ingresos brutos nacionales ajustados- los 900 millones que ganó Avatar de James Cameron en 2009, tomando en cuanto los estándares de hoy día), sino que su impacto cultural fue alucinante. Este documental demuestra, en parte, el delirio que provocó el estreno del filme de Friedkin.
¿En qué se basó tan poderosa creación que suscitó una reacción de tanto miedo, de pavor, en la gran mayoría de los espectadores alrededor del mundo, llevando a algunos incluso al grado de la enfermedad y traumas de esos que no se quitan con el tiempo? ¿Cómo fue que se crearon esos momentos que se convirtieron instantáneamente en clásicos del cine? ¿De qué manera se lograron los efectos (algunos hechos de manera que hoy parece rudimentaria) en el set de filmación?
Vean aquí Raising Hell: Filming The Exorcist, un documental sobre el ‘detrás de cámaras’ de este filme que se convirtió en referencia del género. Así se creó ese infierno para la pantalla.