Las ciudades modernas, esos enormes y dinámicos complejos urbanos que hoy conocemos, comenzaron a establecerse con los procesos de industrialización del siglo XIX. Décadas más tarde, ya en el siglo XX, el cine conformó su propia industria una vez que se habían superado y mejorado los primeros experimentos de las imágenes en movimiento. De esta manera, el cine volteó su mirada hacia las ciudades, espacios que pronto se habían convertido en los lugares más fascinantes. Ejemplo de ello son los primeros registros de las calles de Lyon realizados por los hermanos Lumière en 1895.
Primeros registros de los hermanos Lumière. Varias de las imágenes fueron capturadas en las calles de Lyon durante 1895.
“La década de 1920 fue un periodo clave en el desarrollo de las ciudades", escribe el cartógrafo y explorador urbano, Eric Brightwell. No sólo se vivió el comienzo de la velocidad en las dinámicas internas de la sociedades, sino que también se manifestó una fascinación por la arquitectura como elemento capaz de resguardar la historia y evolución del espacio que se habita. En un censo realizado en 1920 se reveló, por primera vez, que el número de estadounidenses que vivía en las ciudades era mucho mayor al de aquellos que aún permanecían en aldeas, villas o pueblos. En esos años, específicamente en 1925, el destacado arquitecto Le Crobusier comenzó a escribir su serie, 1925 Expo: Arts Déco, y muy pronto, el art déco se asumió como uno de los estilos arquitectónicos más estrechamente asociados con la construcción de rascacielos.
Brightwell añade que “la década de 1920 también dio lugar a la sinfonía de la ciudad”. Este término ha sido definido como una obra audiovisual, cercana al estilo documental, que presenta un retrato de la vida cotidiana dentro de una ciudad intentando capturar la esencia y el espíritu de ese lugar.
A continuación te compartimos las “sinfonías de la ciudad” más importantes que se realizaron en la década de 1920:
Manhatta (1921) de Charles Sheeler y Paul Strand
Retrato de la isla neoyorkina de Manhattan.
Rien que les heures (1926) de Alberto Cavalcanti
Serie de impresiones durante día, tarde y noche en París.
Berlin: Die Symphonie der Großstadt (1927) de Walter Ruttmann
El director se inspiró en Kino Nedelia (1918) de Dziga Vertov para reunir a un grupo de talentosos fotógrafos alemanes (Robert Baberske, Karl Freund, Reimar Kuntze, László Schäffe) para documentar la vida cotidiana de Berlín.
Études sur Paris (1928) de André Sauvage
Cercano al grupo de los surrealistas, el poeta y pintor, Sauvage, realizó un complejo tapiz audiovisual sobre las dinámicas de París; exploró la ciudad para retratar sus barrios, sus habitantes, sus calles, sus vías fluviales, sus campos aledaños, sus monumentos.
Man With a Movie Camera (1929) Dziga Vertov
Retrato de la vida urbana en la antigua Unión Soviética conformada a partir de un vertiginoso montaje que evidencia la fascinación de Vertov por el constructuvismo, el futurismo y la creciente modernidad.
São Paulo, Sinfonia da Metrópole (1929) de Adalberto Kemeny y Rudolf Rex Lustig
Registro de las dinámicas urbanas en América Latina donde destaca la aportación de los migrantes para el crecimiento de la ciudad de São Paulo.
Bezúčelná procházka (1930) de Alexander Hammid
Cortometraje experimental sobre un joven y su paseo, en tranvía, desde el centro hasta las afueras de Praga.
Incluso, algunas películas de ficción de la época se dieron cuenta de la nueva condición urbana y sus repercusiones sobre el hombre, por citar un ejemplo, Metropolis (1927) de Fritz Lang.
LFG (@luisfer_crimi)
Fuente: Open Culture