Por Cristina Incháustegui
La segunda parte de la adaptación cinematográfica de Los juegos de hambre, En llamas, llega no sólo con impacto y agitación, sino con una banda sonora bastante emotiva con la fuerza de los nombres de Patti Smith, Coldplay, The Weeknd, la sensación pop adolescente Lorde, Ellie Goulding, Santigold, Sia, Christina Aguilera, Diplo, entre varios otros artistas reconocidos internacionalmente. Al apostarle a un soundtrack pegajoso y de personalidades, los productores consolidan el éxito de la cinta. Las melodías son predominantemente folk, pop, con ritmos electrónicos y versos estremecedores que fácilmente se volverán emblemáticos así como los aspectos representativos de la saga: el desafío a la autoridad y la rebelión ante una sociedad represiva, la violencia como entretenimiento y la lucha por un futuro justo.
Aunque como Harry Potter y Crepúsculo, Los juegos del hambre es un fenómeno juvenil que está marcando a una generación, a diferencia de estas sagas adaptadas de libros, ésta tiene a una protagonista más compleja, fuerte y determinada y explora sus temas con cierta crítica política. La distopía y el estado fascista no son temas nuevos dentro de la fantasía y la ciencia ficción, sin embargo, la autora de los exitosos libros, Suzanne Collins, logra introducir estas nociones a un público joven difícil de cautivar, moldeándolas de manera astuta y creando personajes que incorporan las preocupaciones e inquietudes de estas generaciones. Katniss Everdeen, la heroína interpretada por una de las ganadoras del Óscar más jóvenes de la historia, Jennifer Lawrence, hace eco de la diosa romana Diana y fascina con su temperamento, sin despojarse de la vulnerabilidad humana con la que todos nos identificamos.
El soundtrack está plagado de voces femeninas, sin duda para enfatizar el carácter del papel principal. “Elastic Heart”, el primer sencillo, se perfila como un éxito instantáneo con su coro épico y estrofas impactantes interpretadas por Sia y The Weeknd (quien también participa con el tema “Devil May Cry”). “Shooting Arrows At The Sky” de Santigold y Lorde con su cover oscuro y dramático de “Everybody Wants To Rule The World” sobresalen con profundas vocales femeninas. Por otro lado, “Atlas”, el tema que la banda inglesa Coldplay compuso especialmente para el filme, es una balada melancólica con vibrantes acordes de piano. “We Remain” de Christina Aguilera es la clásica tonada pop particularmente romántica. “Angel On Fire” de Antony & The Johnsons intensifica el lado más trágico de la trama, mientras “Lights”, del dueto estadunidense Phantogram atrapa con un tono etéreo, apropiado para el contexto futurista de la película. Puede ser que “Capital Letter”, de la legendaria Patti Smith, sea la pieza más madura del conjunto, con su guitarra clásica y versos enérgicos que hablan de rebeldía, renacimiento y fuego. La aclamada banda islandesa Of Monsters and Men aparece con “Silhouettes” y su estilo distintivo se une perfectamente al resto de la banda sonora. Entre los demás títulos están “Who We Are” de Imagine Dragons, “Lean” de The National, la conmovedora “Mirrors” de Ellie Goulding, “Gale Theme”, de The Lumineers y “Place For Us” de Mikky Ekko. Aunque Los juegos del hambre es una franquicia dirigida esencialmente hacia un público juvenil, la música que acompaña a En llamas puede ser atractiva para un rango más amplio de edades y ha dejado satisfechos tanto a melómanos como a fanáticos de la trilogía.