Por: Staff de EnFilme
Sin otro orden que el de la memoria azarosa, va nuestro top ten para que le regales a papá algo que no sea otra pinche corbata.
Camino a la perdición (Road to Perdition, Sam Mendes, 2002) | |
Michael Sullivan Jr. relata esta historia para reivindicar a su padre, Mike Sullivan, un gángster que a pesar de asesinar por encargo, es un hombre honesto y leal. A través de un recorrido por las carreteras del norte de Estados Unidos, Mike (Hanks) da muestra del amor hacia su hijo haciendo todo lo necesario para preservar su vida, incluso si eso implica dar la suya a cambio. |
Fanny & Alexander (Ingmar Bergman, 1982) | |
Una muestra de los dos extremos de paternidad, uno amoroso y atento, otro violento y represivo. La muerte del primero, padre biológico de los niños que dan nombre a este filme, es el punto de partida de la historia; la aparición del segundo, padre putativo por matrimonio, detona el conflicto. Al final, ambos serán un fantasma en la vida de Fanny y Alexander. |
La vida es bella (La vita è bella, Roberto Benigni, 1997) | |
La vida es bella mezcla diversión y delicadeza en la historia de un hombre judío Guido (Benigni) que es llevado junto con su hijo a un campo de concentración nazi. Para que su hijo no se dé cuenta del horror que viven, le hace creer que todo se trata de un juego. Una película que fue premiada desde el Festival de Cannes hasta el Oscar como Mejor Película Extranjera. |
Somewhere: en un rincón del corazón (Somewhere, Sofia Coppola, 2010) | |
A muchos les parece que la súper estrella Johnny Marco (Stephen Dorff) parece más el hermano que el papá de Cleo (Elle Fanning). Puede ser. Pero al menos saben divertirse juntos (algo que él no sabe hacer solo): juegan Guitar Hero, comen helado a medianoche, se burlan de los extranjeros, nadan en una piscina privada y juegan a tomar el té bajo el agua. |
El camino (The Road, John Hillcoat, 2009 | |
El crédito del cosquilleo que produce esta carta de amor de un padre a su hijo es principalmente de Cormac McCarthy, autor de la novela original. En un escenario apocalíptico los dos caminan tratando de que “el fuego” en sus corazones no se apague entre tanta carencia y maldad. Momento maravilloso: el niño haciéndole ver al padre quién cuida a quién. |
Después de la boda (Efter brylluppet, Susanne Bier, 2006) | |
Puedes tener un padre durante toda tu vida y descubrir a otro después de tu boda. Puedes afirmar que tienes dos padres y que a ambos los quieres a pesar de que a uno lo hayas conocido hace apenas unos días. Casualmente los dos están ahí para consolarte el día en que tu corazón está más roto que nunca. Un retrato sobre los profundos vínculos entre padres e hijos que ofrecen todo sin esperar recibir nada a cambio. |
Father of my Children (Le pére de mes enfants, Mia Hansen-Love, 2009) | |
Padre amoroso de tres niñas y afectivo esposo, Grégoire (Louis-Do de Lencquesaing) es también un respetado productor de lo más autoral del cine de autor. Las contrariedades fílmicas y las acumulables deudas son opresivas y pese a ello todo lo capotea con serenidad y clase –hasta que deja de hacerlo. Una observación sagaz y piadosa del malabarismo que exige la combinación cine-familia. |
La habitación del hijo (La stanza del figlio, Nanni Moretti, 2001) | |
El propio Moretti interpreta con aplomo a un respetado psicoanalista y ejemplar padre de familia cuya competencia profesional y templanza familiar se desmoronan cuando uno de sus dos hijos adolescentes –el varón– muere en un accidente de buceo. Pudieron haber ido a correr juntos, pero una cita de trabajo lo obligó a cancelar. La culpa abruma al padre y Moretti fragua un hermoso desenlace tan compasivo como liberador para él y su familia. El filme es prueba irrefutable de que se puede hacer llorar (hasta berrear) eludiendo el melodrama. |
En el nombre del padre (In the Name of the Father, Jim Sheridan, 1993) | |
Los padres son una amenaza para el hijo rebelde: contra la libertad, contra la juventud. Por eso los hijos corren en búsqueda de todo aquello que sus padres no son. Gerry (Daniel Day-Lewis) se reencuentra con su padre en la cárcel, quien le enseña que en una vida las diferencias religiosas no son lo importante sino la lealtad hacia la familia y la justicia. |
No perdonarás (He Got Game, Spike Lee, 1998) | |
Olvídate de cualquier lección: el papá de esta película (Denzel Washington) es un violento reo, chantajista, egoísta, asesino de su esposa. Su máxima cualidad es haber sido estricto en la cancha de basquetbol con su hijo Jesus (Ray Allen), a quien todas las universidades buscan para que juegue con ellos. Su padre lo busca con el fin de reducir la condena, pero nada más. Y, sin embargo, No perdonarás silencia una verdad sencilla y eterna: la historia con tus padres sólo pudo suceder de una manera. Aprende a vivir con eso. |